Después de ser tratada como toda una reina, el lunes por la noche a dormir a la casa que renta mi amante, él es casado, pero gana buen dinero, y su mujer que también trabaja sale los martes, el día que destina para mí.
Él suele despertarme de formas muy bonitas, éste martes, a eso de las 4 de la mañana, mientras duermo, entra al cuarto y con cuidado baja la sábana, y debajo de mi faldita, sólo hace a un lado mi tanga y comienza a masajear mi ano con su dedo, con un poco de vaselina, lo masajea y presiona, mete un poco su dedo, y es cuando siento, pero él no quiere que me despierte, me dice que siga durmiendo, yo lo intento pero él al poco rato empieza a meter algo dentro de mi culo, no se que es, no es largo ni ancho, pero no tiene forma conocida, al fin lo mete por completo, puedo sentir que viene dentro de un condón, pero bueno, él me pidió que duerma, así que eso hago.
Al amanecer siento vibrando, dentro de mi culo, y el sonido de mi alarma ahogado, es mi celular, y está metido en mi culo, yo, simplemente aguardo que termine, para sacar el celular, pero antes llega mi amante, al que llamaré Gil, a darme los buenos días. Lo hace con un beso en la boca, y me ayuda a levantarme para salir a almorzar, entre besos y caricias él me viste, me ayuda con el maquillaje, y la peluca, todo comprado por él, por que le gusta presumirme, que salgamos en público, claro, no en morelia, pero en otro lugar donde ni las amistades de su matrimonio, ni quienes no saben mi identidad de nena vivan.
Así, ya arreglada y perfumada, pero con el bendito celular atorado en mi culo, me pide que nos vayamos, yo no se que idea loca tiene pero total, se siente bien tenerlo dentro, normalmente me subo en la parte de atrás de su Voyager polarizada, voy escondida y es hasta que salimos de morelia que me paso adelante, pero ésta vez me abre la puerta de adelante, yo con la mirada le expreso mi duda, y él con la suya me da la confianza, subimos, y antes de abrir la puerta automática de la cochera, me dice que tendré que agacharme mientras salimos de morelia, yo con mi cara de puchero le digo que para que me hace ir adelante entonces, me voy a ir aburrida y como mensa ahí agachada y mientras me quejo, él sonriendo se baja el cierre del pantalón y se saca su pene, ya bien erecto, seguro por pensar en su idea de lo que quiere que haga, pero bueno, con lo que me encanta tener su pene (o cualquier otro) en la boca, me agacho gustosa y comienzo a jugar con el con mi lengua, a chuparlo, a succionarlo, saborearlo, no entiendo como puede manejar así, pero no me importa, sólo quiero seguir saboréandolo, sin darme cuenta, pasé mas de media hora chupándoselo, no se por que no me dió mi regalito de leche, quizá iba mas concentrado en manejar, o en que no se dieran cuenta los demás conductores, no se, pero al asomarme hacia afuera estamos estacionados afuera de un burger king, no se donde es pero no es en morelia, se nota, ahí veo que él aprovechó para ponerse un condón, yo me pregunto si tendrá algo perverso en mente, es apenas medio día, hay gente de todas edades en la calle, y mientras pienso tantas cosas, él me toma de la nuca y me jala hacia su pene, pero no me lo mete, lo deja a milimetros de mis labios, yo nunca he chupado uno con condón, debe saber a plástico, pero no se, y ahora que lo pienso, está lubricado, ¿va a entrar más fácil? y mientras pienso, sin darme cuenta abro sólo un poco la boca, y al momento me baja y sume por completo su pene de 15cm en mi boca, entra fácilmente por lo lubricado que está, pero no puedo evitar sentir que me ahogo, que me rompe por dentro, y aún así, él inicia un mete-saca, completo, lo saca de mi boca y lo mete por completo una y otra vez, está literalmente haciéndome el amor por la boca, yo no lo puedo negar, se siente feo sentir ganar de vomitar, pero me encanta pensar como lo disfruta, como me veo, como goza de mi, seguramente es algo que nunca podría hacerle a su esposa, yo me pierdo mientras me relajo, él hace todo el trabajo, es como si se estuviera masturbando con mi boca, y me encanta, pero al cabo de poco rato él estalla, sin darme de nuevo mi premio que se queda atrapado por el látex que usó, y yo sin saber por qué, finalmente amarra el condón y lo guarda en mi bolsa de mano, como si fuera su basurero, que grosero.
Una vez que se limpia y se acomoda los pantalones, y yo me he pintado de nuevo los labios, y acomodado los ojos que lloraron durante sus embestidas, baja del auto, y como todo un caballero me abre la puerta, entramos y me manda a sentarme mientras él se forma para ordenar, yo ya sentada en mi mesa lo veo tranquilamente sacar su celular, y se lo lleva a la oreja, no se si le hablará a su esposa o a quien, apenas empiezo a preguntarme cuando una vibración desde dentro de mí me recuerda lo que había olvidado que llevo dentro de mi culito, una sonrisita de complicidad le deja ver que estoy sintiendo lo que hace, él en la fila me da la espalda, con el celular en la mano, marcando de nuevo en cuanto termina de sonar, yo me estoy deshaciendo sentada solita en mi silla, esperando a que voltee para pedirle que pare con la mirada, pero no lo hace, yo me pierdo en la ventana del establecimiento tratando de controlarme y no meterme lo primero que encuentre con la forma correcta, de pronto se detiene y cuando busco al responsable, ya está sentado conmigo, nunca me di cuenta, ignoro su sonrisa burlona para comer, termino mi hamburguesa, y como siempre, las papitas al final, pero cuando me ve decidida a ir por las papitas, saca de mi bolsa el condón lleno de su semen, y me lo da a escondidas, sonriendo me dice, "así te van a gustar mas", y tiene razón, pero el lugar está lleno, y cualquiera podría voltear, así que trato de desamarrarlo bajo la mesa, cuando me pone el celular a vibrar de nuevo, de por sí está resbaloso, lleno de mi saliva, y con esa distracción apenas puedo, después de un rato lo logro, y tratando de taparlo con mi otra mano, lo vacío todo en mis papitas, no me he atrevido a voltear a ver si alguien se dió cuenta, pero de inmediato guardo el condón, y tomo la primera papita, frente a Gil, la chupo para saborear ese semen ahora salado pues cubría a mis papitas, y así, una a una las voy limpiando de semen y luego comiendola, hasta terminar.
La tarde es menos exitante, pero igual me encanta, paseamos por la plaza, comemos, jugueteamos nos damos besitos en público, somos como novios, ya de regreso por la noche cenamos en casa, y como un buen amante me sube cargando al cuarto, como si fuera nuestra luna de miel, ahí me recuesta con cariño, me besa en la boca, me acaricia el cuerpo mientras yo acaricio su pene, lo hago que se moje y me llevo los dedos a la boca, él me pone boca abajo y con su boca y su lengua me lame mi agujerito, él sabe como hacerme enloquecer de esa forma, con cuidado saca el celular y me penetra poco a poco, mientras me besa las mejilas pues yo estoy boca abajo, mordiendo mi almohada, disfrutando de mi amante toda la noche, hasta quedar dormida y con mi culito lleno de su leche.... es todo un amor, pero se ha ido con su mujer, con una mujer de verdad, pero una que no le cumple sus deseos y fantasías.
